El Ayuntamiento de Sant Antoni de Portmany ha puesto en marcha este lunes 14 de abril el servicio de salvamento, socorrismo y accesibilidad en todas las playas del municipio, con el objetivo de «garantizar la seguridad de los bañistas y cumplir con la normativa vigente», explican a través de un comunicado.
¿TE HA GUSTADO ESTE CONTENIDO? PUES... ¡TIENES TODOS NUESTROS PROGRAMAS COMPLETOS AQUÍ!Según informan desde la concejalía de Medio Ambiente, Playas y Limpieza, este año el servicio se amplía, comenzando el 15 de abril y finalizando el 31 de octubre, dos semanas antes que la temporada anterior.
El dispositivo está formado por un equipo de 17 socorristas, entre ellos dos patrones y un responsable de coordinación, que operan en las playas de Es Pouet, s’Arenal, Caló des Moro, Cala Gració, Cala Gracioneta, Cala Salada y Cala Saladeta. El servicio incluye siete torres de vigilancia, un puesto de socorro en s’Arenal y una embarcación que patrulla el litoral de manera continua.
El horario de cobertura varía en función de la temporada: de 11 a 17 h en temporada baja (del 15 al 30 de abril y del 15 al 31 de octubre), de 11 a 18.30 h en temporada media (del 1 al 31 de mayo y del 16 de septiembre al 14 de octubre) y de 10 a 19.30 h en temporada alta (del 1 de junio al 15 de septiembre).
Durante los meses de verano también se incorpora un socorrista especializado en el baño asistido, que se encarga de estas tareas sin dejar de lado las funciones generales de vigilancia y rescate. Además, se ha renovado la torre de vigilancia de Es Pouet para mejorar las condiciones de sombra y visibilidad del personal.
En paralelo, se ha instalado el balizamiento de las playas para delimitar las zonas de baño y separar las áreas reservadas a actividades náuticas, cumpliendo con las exigencias normativas. La retirada de posidonia muerta está programada para el mes de mayo, conforme al protocolo del Govern balear. Esta se almacenará temporalmente y se devolverá al final de la temporada.
Las playas de Sant Antoni mantienen certificaciones medioambientales como el Reglamento Europeo EMAS y la UNE-EN ISO 14001:2025, además de la certificación de accesibilidad UNE 170001-2:2007. Como en la temporada anterior, las duchas permanecerán cerradas como medida simbólica para concienciar sobre la sequía y la necesidad de reducir el consumo de agua.
El servicio está adjudicado a la empresa Marsave Mallorca S.L., con un contrato de cuatro años y un presupuesto anual de 789.980,65 euros, lo que supone un incremento del 74 % respecto al contrato anterior. Esta mejora económica ha permitido una subida salarial superior al 20 % para el personal de playas, ajustándose al nuevo convenio colectivo del sector en las Illes Balears e incorporando el factor de insularidad. También se han actualizado los planes de emergencia, evacuación y salvamento, adaptándolos al nuevo contrato.