La Junta Directiva del Club de Vela Port d’Andratx manifiesta su más rotundo rechazo a la decisión tomada por el Consejo de Administración de Ports IB de adjudicar las instalaciones del club a la empresa IPM.
¿TE HA GUSTADO ESTE CONTENIDO? PUES... ¡TIENES TODOS NUESTROS PROGRAMAS COMPLETOS AQUÍ!Ports IB ha aprobado la adjudicación de las instalaciones portuarias náutico-deportivas que ha gestionado y desarrollado el Club de Vela Puerto de Andratx desde los años 60, a la empresa Iniciativas Portuàries Mirall de Mallorca (IPM). Una decisión que han criticado desde el club de vela ya que han cumplido reglamentariamente con las obligaciones impositivas, tarifarias y de servicio público durante todos estos años.
El Club de Vela Port d’Andratx (CVPA) lamenta las situaciones de indefensión en que ha tenido que venir ejerciendo su responsabilidad por razones ajenas a su propia organización, la mayor parte derivadas de malas praxis político-administrativas -según se desprende de las explicaciones y decisiones jurídicas posteriores-, que han llevado a este punto tras un largo conflicto de 21 años.
El CVPA considera reprobable el resultado discriminatorio de haber sido convertido en el único gestor de puertos deportivos, anterior a la ley de puertos de 2005, sometido a concurso público, un concurso que curiosamente la administración pública nunca llegó a concluir.
El CVPA, una institución social sin ánimo de lucro entre las más admiradas de España, que ha sido catalizador del desarrollo socioeconómico de una zona singular y estimada como es el Port d’Andratx, seguirá defendiendo los derechos de los socios y los deportistas hasta donde la ley permita, aun asumiendo, como es lógico, la sentencia del Tribunal Supremo de 18 de abril de 2017, cuyos términos el CVPA siempre ha considerado imposibles de ejecutar debido a que las infraestructuras previstas en las bases del concurso de 2002, a que remite la sentencia, están superadas por las grandes inversiones que el CVPA ha venido realizando a lo largo de estos 21 años en ampliación y mejora de las instalaciones.
Por último, el CVPA deplora la indeseada evolución que sufrirá el puerto y la comarca con el cambio de gestor, si esto al final se produce, pasando de una entidad local sin ánimo de lucro a una sociedad limitada como es IP3M, de una entidad deportiva a una empresa estrictamente comercial, con intenciones monopolísticas, como se puede apreciar actualmente en el conflicto que mantiene por el reparto de los muelles de Palma.