Felip Moll se prepara para la segunda etapa de la 10º edición de la regata Oceánica SAS

Felip Moll Marquès, menorquín, está participando con su proto de la Clase Mini 6.50 en una regata oceánica que consiste en salir de las Sables de Olonne, llegar a las Azores y volver. En total unas 2500 millas náuticas. Llegó el pasado martes 30 de julio y vuelve a salir este próximo domingo 4 de agosto.

Este martes pasado día 30 de julio a las tres de la mañana, y finalmente después de 10 días intensos de navegación, Felip Moll y su proto “Ginjol 931” llegaron a su destino, al puerto de Horta de la Isla de Faial, concluyendo así la primera etapa de la décima edición de la regata Oceánica SAS. Al finalizar esta primera etapa, el regatista ha comentado que “ha sido una regata muy entretenida estratégicamente y con dos momentos muy complicados”, el primero, con un frente en el Golfo de Vizcaya con vientos sostenidos de hasta 38 nudos y olas de 3 a 4 metros, y donde afirma que por primera vez desde que compite con “Ginjol”, se vio forzado a izar el tormentín para poder aguantar estas condiciones con seguridad. 

El segundo momento duro fue la encalmada final donde tardó más de 24 horas en hacer las últimas 20 millas, al posicionarse, el anticiclón de las Azores encima de la flota. Asegura que fueron horas que requirieron mucha fortaleza mental. 

Además, sufrió la ruptura del botalón mientras planeaba a 17 nudos, pasado el Cabo de Finisterre, hecho que lo hizo retrasarse durante 24 horas mientras ideaba una solución de emergencia.

“Ha sido una regata dura, y desgraciadamente otros competidores han tenido que abandonar por problemas como orcas, rupturas de quillas, mástiles, cascos o incluso, problemas de electrónica”, y un incendio a bordo que hizo perder el mini a April Marine de Mateo Le Calvic. 

Ahora Felip está reparando el botalón y preparando la estrategia para poder continuar con la segunda etapa que dará comienzo el domingo 4 de agosto con dirección hacia las Sables d’Olonne nuevamente.