La evolución de las playas a través de fotos de ciudadanos

El Sistema de Observación y Predicción Costero de las Illes Balears (ICTS SOCIB) ha instalado el primer sistema de ciencia ciudadana para el seguimiento de playas en S’Amarador, en el Parque Natural de Mondragó.

Este proyecto forma parte de la iniciativa internacional ‘CoastSnap’ de ciencia ciudadana, implantada en más de 35 países en los 5 continentes, que permite obtener imágenes en playas en las que la instalación de sistemas de monitorización no es posible, promoviendo así la inmersión de la sociedad dentro de la investigación en dinámica costera. “En esta era digital y con una creciente concienciación ciudadana sobre los efectos del incremento del nivel del mar y de cambio global en las zonas costeras, las instituciones y la investigación pueden sacar provecho de la interacción de la ciudadanía con el medio para realizar estudios que puedan ser beneficiosos para la sociedad, generando conocimiento para la gestión, la prevención y la actuación frente a futuros escenarios”, destaca la investigadora responsable de la instalación de Monitorización de Playas de la ICTS SOCIB y líder del proyecto ‘CoastSnap Balears’, Àngels Fernàndez-Mora.

Así, ‘CoastSnap Balears’ consiste en la instalación de un soporte de altura y coordenadas conocidas, donde los usuarios pueden colocar su teléfono móvil y hacer una foto de la costa. Una vez hecha la foto, los usuarios pueden compartirla por mail (coast.snap@socib.es) o a través de las redes sociales (@CoastSnapBal o #CoastSnapSamarador).

Las fotos realizadas por la comunidad se utilizarán para medir con precisión los cambios en la playa y establecer un registro a largo plazo de la posición de la costa y otros elementos relevantes como las dunas o las acumulaciones de Posidonia oceánica, permitiendo estudiar la dinámica de la playa. Además, los resultados obtenidos a partir de las imágenes enviadas por los usuarios se publicarán periódicamente en las redes sociales, ayudando a la ciudadanía a comprender la utilidad de los datos, los procesos dinámicos en la costa y la importancia de la conservación de la playa.

Esta primera instalación formará parte de una red que la ICTS SOCIB tiene previsto desplegar en los próximos meses en playas de especial valor ecológico y de interés científico de las Illes Balears, incluyendo el Parque Natural Maritimoterrestre Es Trenc-Salobrar de Campos.

“La red de sistemas ‘CoastSnap Balears’ nos permitirá contribuir al conocimiento científico de la evolución de la línea de la costa frente a diferentes climas de oleaje y playas de diferente tipología, estudiar las tendencias de evolución de la línea de costa y proveer a las autoridades de datos fiables y asesoramiento científico para la gestión y determinación de estrategias de adaptación frente a los efectos del cambio climático”, según Joaquín Tintoré, director de la ICTS SOCIB.

La costa de las Illes Balears presenta un amplio espectro de ambientes costeros: playas encajadas, playas expuestas, costas rocosas y albuferas. Esta variabilidad medioambiental confiere a las islas un gran valor ecológico. Además, según los investigadores, la zona costera representa la primera línea de defensa frente a los efectos del cambio global, y en particular, el aumento del nivel del mar y los cambios en los patrones de oleaje. “Entender el impacto que producen las condiciones cambiantes de oleaje y mareas meteorológicas en las playas es clave para una gestión y una planificación costera eficientes y medioambientalmente sostenibles, enfocadas en la adaptación al cambio climático”, explica Àngels Fernàndez-Mora. “Para comprender y poder prever la evolución de las playas, es necesario monitorizar cómo cambia la costa a lo largo del tiempo. La ciencia ciudadana ha abierto una vía en la que son los propios ciudadanos quienes, con su colaboración, pueden ayudar en estos seguimientos a medio y largo plazo”, añade.

El conseller de Medi Ambient i Territori, Miquel Mir, se ha mostrado “muy satisfecho” porque el proyecto se inicie en el Parque Natural de Mondragó “poniendo en valor la importancia que tienen los espacios naturales protegidos a la hora de generar información de relevancia científica que nos permita preparar una respuesta resiliente a los retos de la emergencia climática”. En este sentido, ha añadido, además, que “involucrar a la ciudadanía le da un plus de calidad al proyecto porque también ayuda a concienciar sobre la necesidad de mantener estos espacios bien conservados”. Por último, Mir ha confiado en que “el proyecto otorgará datos muy útiles sobre la dinámica de la línea de costa del Parque Natural que ayudarán a planificar su gestión futura”