La náutica balear despide un 2023 complejo e incierto

Jaume Vaquer, presidente de la patronal náutica de las Islas, AENIB, analiza la situación del sector y hace balance del año.

En lo que va de año, se han matriculado en Baleares 1.059 embarcaciones de recreo, una cifra casi idéntica a la registrada hace exactamente un año, cuando se contabilizaron 1.056 unidades matriculadas. El incremento interanual, por tanto, se sitúa en un ligero 0,28%, según datos de la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN), entidad de la que forma parte la Asociación de Empresas Náuticas de las Islas Baleares (AENIB). 

El presidente de la patronal náutica balear, Jaume Vaquer, analiza en declaraciones a Pasión por el Mar la situación del sector en las Islas y hace balance del año que está a punto de concluir.

“En 2022, ya estábamos en un marco de precios altos derivado de la pandemia y del estallido de la guerra de Ucrania el año pasado, pero el año se cerró, en general, con buenos resultados en las empresas del sector. En este 2023, los precios y los tipos de interés han continuado al alza, y el estallido de la guerra en Israel ha añadido aún más incertidumbre. A diferencia del año pasado, los resultados no serán tan buenos al cierre de 2023”, vaticina. 

En este punto, Vaquer hace referencia a las buenas cifras del sector turístico durante esta temporada, en que el número de visitantes que han llegado a Baleares hasta octubre ha sido de alrededor de 14 millones. “En Baleares, aunque la temporada turística ha batido récords, ha bajado sensiblemente la capacidad de gasto de nuestros visitantes, lo que ha afectado de lleno al sector. Asimismo, en un contexto de tanta incertidumbre, nuestros clientes están a la espera de noticias y prefieren contener el gasto, especialmente en aspectos lúdicos o de recreo y no imprescindibles, como puede ser la náutica. Así como en 2022, tras la salida de la pandemia, la gente estaba deseando disfrutar de la vida y volver a la normalidad, en 2023 se impone la prudencia ante un panorama lleno de incertidumbres”; analiza. 

En cualquier caso, matiza, “es cierto que todo esto no afecta demasiado a la gama más alta dentro del sector, de forma que en el ámbito de las grandes esloras no se ha notado tanto el descenso de las ventas”.

Por otro lado, hace referencia a que “el mercado se encuentra en situación de sobrestock por parte de los fabricantes y distribuidores. Ello se debe a que, durante la pandemia, se registró una fuerte rotura de stock por las tensiones a las que estuvieron sometidas las cadenas logísticas. Ello, sumado al fuerte auge de la demanda, obligó a las empresas del sector a aumentar los pedidos para poder satisfacer a sus clientes en el menor tiempo posible. Ahora, la situación ha dado un giro de 180 grados y tenemos una oferta que supera con creces la demanda”, alerta.  

De cara a 2024, Vaquer vaticina que se mantengan todas las tendencias observadas este año, y destaca como un reto prioritario para AENIB lograr el reconocimiento de la náutica como sector estratégico.