La Dragonera es una zona con gran potencial de vida marina y de reservorio para la conservación de hábitats marinos importantes para las Baleares, y es que, la Reserva Marina de Sa Dragonera alberga una gran diversidad de hábitats y comunidades en un espacio relativamente reducido.
¡SIGUE NUESTROS PERFILES EN REDES SOCIALES Y DISFRUTA DEL MAR EN TU MÓVIL!Las aguas de Sa Dragonera disfrutan de protección de Reserva Marina de Interés Pesquero, y están divididas en dos franjas. La franja de aguas interiores, entre Sa Dragonera y la costa de Mallorca, llamada Reserva Marina de Es Freu de Sa Dragonera. Y la franja de aguas exteriores, llamada Reserva Marina Isla Sa Dragonera, que justo hoy cumple un año desde su creación.
Reserva Marina Fernando Garfella
Hoy hace también un año que desde el Ayuntamiento de Andratx se volvió a solicitar que la reserva marina del Freu de Sa Dragonera llevara el nombre de Fernando Garfella, (submarinista mallorquín fallecido en agosto de 2020 mientras buceaba entre Sa Dragonera y Cala Estellencs) como una forma de homenajear a este gran profesional del buceo y documentalista al que le preocupaba la preservación del medio marino.
Aunque esto todavía no se ha conseguido, la mirada del submarinista Garfella vuelve a estar en el mar con una escultura de Xabi Amonarraiz Arcos. La figura “Ull de peix” se instaló el pasado mes de agosto en el fondo del mar, justo en el extremo sur de la isla, frente a la isla, para rendir homenaje al documentalista subacuático. De esta manera, se ha querido representar que el buceador andritxol continúa cuidando y observando el fondo del mar balear sin descanso.
En total son 450 hectáreas de área protegida, de las cuales un 6 % es zona de reserva integral, es decir, que es un espacio protegido en el que no está permitida ninguna actividad excepto el seguimiento científico. Dentro de esta zona de reserva integral, hay cinco ubicaciones de uso restringido donde se puede nadar y bucear, siempre con previa autorización.
Los fondos marinos de Sa Dragonera están compuestos por praderas de posidonia oceánica, que son hábitat y refugio para numerosas especies. Además de fondos coralinos, en la costa de poniente y hacia el norte de la isla, con organismos tan singulares como las gorgonias y formaciones como los fondos de Maërl, estructuras que dan refugio a diferentes especies de invertebrados, formando una comunidad única y especialmente frágil. Y fondos rocosos y abruptos, con numerosas grietas y cuevas en los acantilados que suponen hábitats valiosos para una gran variedad de especies. Por otro lado, la costa oriental de la isla está dominada por fondos de arena, donde habitan y se alimentan especies adaptadas a estos espacios abiertos.