Moat, del armador argentino Juan Ball, ha revalidado título y se ha coronado vencedor de la Ibiza JoySail en la categoría Performance y Hyperion lo ha hecho en la categoría World Cruising.
MANTENTE PUNTUALMENTE INFORMADO DE LO QUE HACEMOS Y RECIBE NUESTRO NEWSLETTER.En esta segunda edición de la regata para superyates, Moat, un Swan 155 del armador argentino Juan Ball, que el año pasado fue el vencedor en una clase única, ha vencido este año en la categoría Performance, una clase en la que han participado siete unidades de entre 70 y 155 pies de eslora.
De esta forma Moat, patroneado por Guillermo Parada y con el español Juanlu Páez a la navegación ha revalidado el título conseguido en 2021, siendo así el claro referente en esta regata y consiguiendo además el récord de la travesía entre Palma e Ibiza con un tiempo de 7 horas, 5 minutos y 30 segundos.
Su gran rival ha sido el otro barco ‘regatero’ All Smoke, un SW-RP 90, que ganó la última prueba por tan solo 40 sobre Moat, en un final apasionante. Mientras que Sapma, un Swan 80 fue una de las sorpresas al acabar cuarto en la general al superar en la última jornada a Bella 2, un Y90, que hacía su primera regata en Ibiza tras salir del astillero. El otro Swan80, Dark Horse, ha ganado la última prueba de la Ibiza JoySail, además de tres de las cuatro pruebas, pero al no terminar la Palma-Ibiza, no le ha podido disputar a Sapma el título Corinthian.
Hyperion, el barco más grande de la flota, un Frers 155, ha finalizado invicto la Ibiza JoySail en World Cruising. El barco americano ha ganado las cuatro mangas celebradas, tanto la regata larga como las tres costeras en aguas Pitiusas. Windrose of Amsterdam con Javier ‘Bubi’ Sansó, que con un Dystra 152, ha estado luchando durante toda la regata con Bliss, un YD 120, que el año pasado acabó segundo y este año tercero.
En esta cuarta y última jornada de la Ibiza JoySail 2022 el Comité de Regatas estuvo dilucidando si dar la vuelta a Formentera de 36 millas o un recorrido costero con paso por el islote de Espardell. Finalmente, y debido a la meteorología con lluvia y vientos que no aseguraban una vuelta rápida, optaron por este segundo recorrido costero entre las islas de Ibiza y Formentera con varios chubascos y vientos que llegaron a soplar entre 18 y 20 nudos del suroeste.
De esta forma se cierra una brillante edición de la Ibiza JoySail que volverá entre finales de verano y principios de otoño de 2023, con posibles novedades. Y es que, el impacto que está teniendo la Ibiza JoySail entre los superyates ha hecho que la Clase J se esté planteando estar en la próxima edición en la regata.
El secretario de la Clase J, Stuart Childerley, estuvo presente en el evento y explicó que “he estado observando todo el montaje de la regata Ibiza JoySail y se puede ver que hay un verdadero esfuerzo para asegurarse de que los competidores y los barcos tienen todo lo que necesitan” y añadió que “es un gran evento, lo tiene todo. Es una ciudad encantadora, Marina Ibiza cuenta con grandes instalaciones y los organizadores están haciendo un gran trabajo de promoción del evento.” En noviembre los propietarios de Clase J decidirán las sedes a las que irán en 2023 e Ibiza está en las quinielas.